Explico mi trabajo con ejemplos: un estudio del
mercado de una nueva actividad; una encuesta telefónica de
satisfacción para un ayuntamiento; un grupo de trabajo en
una empresa industrial para buscar, ordenar y gestionar información
de los clientes; etc.
No siempre recibo una mirada de comprensión, ya que cada
proyecto de consultoría es singular, es un producto artesano
en el que se combinan unas necesidades específicas con un
estilos particulares de consultor y cliente.
Si hay un elemento común: la información
del mercado, su captura y gestión para mejorar productos
y servicios, para orientarlos hacia segmentos, para entender las
claves de la satisfacción de las personas en su rol de compradoras
y usuarias.
Información de mercado accesible y útil para quienes
la necesitan, con independencia de su cargo, del lugar donde trabajan
o su grado de participación en la gestión. Este es
habitualmente el reto mayor, conseguir que la información
sea útil para la acción.
Todo ello lo realizo en solitario o con otros consultores y consultoras
que comparten algunos de estos “modos”, y con los que
sostengo una red de relación invisible. |